Corto paseo por la circular turismo rural-turismo sostenible-ecoturismo

Hasta hace un par de años hablábamos de turismo rural muy a menudo. Se convocaban subvenciones que facilitaban la rehabilitación de casas tradicionales para ese uso, numerosas páginas web de todo el país ofrecían alojamiento en casas y hoteles rurales, y también se hablaba del turismo activo y de los senderos como “actividades complementarias al turismo rural”. Durante más de dos décadas el turismo rural era el principal motivo para captar inversión de fondos públicos y privados en el medio rural al objeto de fomentar la actividad económica, y se escribía también mucho de turismo rural, como muestra recojo algunas de las relexiones y aportaciones que recojo en mi blog.

Sin embargo en la actualidad es palpable que  los términos ecoturismo, o turismo sostenible han irrumpido con fuerza y parece que vienen para quedarse. Seguramente que ahora hablamos más en perspectiva de territorio y nos referimos al turismo sostenible como una actitud y un conjunto de actividades que caracterizan un tratamiento responsable de la actividad turística en un territorio concreto. Es muy probable que en nuestra isla, la implantación de la Carta Europea de Turismo Sostenible sea el motivo principal para empezar a hablar con fuerza de turismo sostenible.

Por otro lado, las razones de porqué en La Gomera el término ecoturismo se ha hecho más habitual tienen que ver con varios factores. En primer término influye el proyecto de cooperación interterritorial denominado Los Parques Nacionales como destinos de turismo sostenible,  cuyo cooerdinador es AIDER Gomera. En ese programa plurianual una de sus acciones consiste en desarrollar un plan estratégico para el ecoturismo de cuya ejecución y repercusiones se tendrá que hablar con más asiduidad. La celebración de un Congreso Internacional de Ecoturismo organizado por el Parque Nacional de Garajonay en noviembre de 2011 fue igualmente hito principal para aprender más al respecto y para trabajar más el concepto.

A finales del pasado mes de junio se celebró en Extremadura el I Congreso Nacional de Empresarios de Turismo de Reservas de la Biosfera y Espacios Naturales Protegidos, en el cual participé a propuesta de AIDER Gomera. Buena parte de los participantes eran asociaciones y empresarios turísticos que en su momento dieron de alta la actividad como turismo rural y que ahora ven abrirse nuevas oportunidades de negocio utilizando una nueva terminología que, en principio, abriría las puertas a una más que incipiente demanda del mercado turístico.

El hecho es que la aceptación y cercanía en la población de los términos ecoturismo y turismo sostenible es cada vez mayor, como también lo son las publicaciones y artículos relacionados con el turismo en espacios naturales.

La Administración también se sube al carro. En el Plan Nacional e Integral de Turismo (PNIT) que estructura la intervención del Ministerio a partir del 2013 se menciona expresamente el ecoturismo y compromete  formas de promoverlo y comercializarlo.

Pensando en términos generales me cuestiono en qué hemos cambiado nuestras pautas de sostenibilidad o nuestra conducta ecológica para poder aspirar a ofrecer un producto consecuente con su denominación y, por lo visto,  diferente al del turismo rural. Bien es cierto que los atributos de La Gomera en cuanto a Espacios Naturales Protegidos son muy abundantes, y que la flamante declaración de la isla como Reserva de la Biosfera no hace sino reconocer nuestro histórico buen hacer. Sin embargo estos reconocimientos no tienen porqué avalar también nuestra conducta como empresarios turísticos. Ese aval nos lo tendremos que ganar generando alojamientos, comidas con ingredientes sanos en restaurantes, transportes poco contaminantes, etc.  en una línea clara de respeto a la naturaleza y a la sostenibilidad.

(Artículo del autor del blog publicado recientemente en los periódicos digitales insulares gomeranoticias y gomeraverde)